Te doy la bienvenida !

Me llamó Mauro y soy un Montevideano ahora radicado en un pequeño pueblo de costa de Bahía llamado Imbassai (Brasil) y que a veces tengo una necesidad imperiosa de escribir tonterías ... y como este espacio es gratis y el aire libre y por suerte el pensar también.... aquí van mis comentarios, que solo son eso, comentarios y anécdotas u observaciones desde las ventanas de mis ojos, que sin duda es el lugar más limitado desde donde ver las cosas. Pero es lo que tengo y es lo que hay, no pretendo que te sea útil para nada, pero si cuando los leas te apetece y quieres dejarme un comentario, pues puedes hacerlo. Un saludo de este gato calandraca, pero que aún anda por los tejados. Espero encontrate en algún tejado que otro y no te quedes todas las noches seguro y encerrado en tu casa.






viernes, 10 de mayo de 2013

Un zapato azul otro rojo

Se maquillaba todas las mañanas, como diciendo pero también simulando, se había mirado en el espejo y se veía hermosa, durante gran parte de la noche se había estado tocando, dándose placer a si misma. Estaba sola, pero se sentía acompañada. De a ratos suspiraba hondo, ahora también tenía tiempo para escuchar música, siempre lo tuvo, pero no siempre lo usaba.
El color azul era su preferido y disfrutaba viéndolo y poniéndose prendas de ropa que convinaran, contrastaran o ni convinaran ni contrastaran. Hasta le daban ganas de usar un zapato de azul y el otro rojo, hasta ahora no se había animado, sera cuestión de tiempo se aseguraba.
Se sentía bien por si misma, sin necesitar demasiado de los otros. Había dejado de celebrar sus cumpleaños para celebrar los días. Ahora podía mirar y ver, ella sentía que por largo tiempo había estado ciega, pero ya no le importaba, ahora veía.
Paso, le vio, le guiñó un ojo y siguió, ya habría tiempo. Ahora era su tiempo, desde hace algún tiempo era su tiempo.

domingo, 29 de mayo de 2011

Las cosas en su sitio

Una de las cosas mas difícil de conseguir es la de poner las cosas en su sitio. No me refiero tanto al orden de las cosas de la casa, de la biblioteca o de la despensa, me refiero a las otras. A aquellas cosas que llevamos tiempo y tiempo intentando colocarlas en su sitio o darle el sitio que sentimos debe de tener, pero que no hemos sido aún capaces de hacerlo.
No se exactamente si la imposibilidad de hacerlo esta dada mas por la falta de voluntad  que por otra cosa.
De todas formas esas cosas están allí, latentes, esperando pacientemente a que en cualquier momento las pongamos en su sitio, y de una vez , aunque sea en esos temas. Nos quedemos tranquilos.

miércoles, 18 de mayo de 2011

DISTRAIDOS

Como hemos llegado hasta aquí. Miles.. . que digo miles, millones de caminos que se cruzan y encuentran todo el tiempo. Personas, personitas. Algunas pocas concentradas, atentas a algo, en el aquí y ahora y las más, el resto de los miles de millones… DISTRAIDOS.
Y para distraerse no hace falta mucho, es más, es lo más sencillo del mundo, basta una mosca, una televisión o una discusión. Nuestros propios problemas imaginarios y en las innumerables situaciones innecesarias en las que nos metemos también son buenas excusas. El pasado nos distrae y mira que ya nos ocupó bastante cuando paso.
El trabajo y el que dirán, la ropa de moda, el tiempo, las deudas, lo que debemos y sobre todo las deudas que tienen con nosotros (o que nosotros creemos que tienen). Los miedos…. Estos si que ocupan mucho de nuestro tiempo, así que de alguna forma nos distraen, nos mantienen ocupados. La lástima por nosotros mismos. La imaginación de lo que nos gustaría que nos pasara o lo que nos gustaría tener. La envidia, los celos.
El tiempo que nos lleva intentar controlar al otro o por lo menos intentar que cambie a mi manera, eso también me distrae. Los flotadores que me salen al costaito. Las arrugas. La televisión otra vez. Mi falta de fe. Mi exagerada fe. Y otra vez lo que pasó, me vuelve a distraer.
Pero me parece que a veces o en algún momento nos voy a cansar de estar distraído, porque me estoy comenzando a preguntar… si todas estas cosas me distraen… ¿de qué me están distrayendo? O dicho de otra manera... ¿Qué me estoy perdiendo?

domingo, 1 de mayo de 2011

Diferentes y cambiando todo el tiempo

Van pasando los años y cada vez me sorprende más lo diferente que somos uno de otros. ¡Pero diferentes diferentes!
Porque soy diferente a ti y tú diferente a mí y ambos diferentes de todo el resto.
En tus zapatos, en tu camisa, en como miras, en como ves, en cómo me muevo, en cómo te mueves. En lo que me ilusiona, en lo que me preocupa, en mis miedos, en lo que me pone ansioso. En adónde voy y de dónde vengo. En lo que leo y escucho. En lo que no leo y escucho. En lo que como. Con quien me junto y a quien ignoro. Lo que han visto mis ojos y lo que no he sido ni soy capaz de ver. En lo que bebo y en cuanto bebo. En los momentos que siento frio o calor. En lo que conozco y en lo que ignoro. Lo que me hace conciliar el sueño y lo que me lo quita. En el grupo familiar en el que nos hemos criado. En los sitios que hemos visitado y conocido. En cómo me tumbo en la cama. En como manipulo y como manipulas. En lo que creo y en lo que he dejado de creer. En cómo cambio y lo que cambiaré.